Es la persona que está incondicionalmente a tu lado, para lo bueno, para lo malo, para cualquier cosa sin excepción, es esa persona que si está ocupada deja lo que esté haciendo para ayudarte, para entenderte, para escucharte, para calmarte, para aconsejarte, para arrancarte una sonrisa, aunque en ese momento te gustaría tenerla un rato más y desahogarte más no puedes, porque sabes que está ocupada, porque entiendes que ha sido un esfuerzo por su parte dejar lo que estaba haciendo para atenderte, y se te dibuja una sonrisa en la cara porque aún estando ocupada, unos minutos han sido dedicados a ti y eso es lo que importa, que ha sabido dedicarte el tiempo que a ella le falta, que aunque tenía muchísimas cosas que hacer, ha encontrado tiempo de donde no lo había, porque ella es capaz de darse cuenta cuando la necesitas a ella, la necesitabas a ella. La única persona que sabes que no te va a fallar, que cuando nadie estaba, cuando era época de exámenes, o un sábado que tocaba irse de fiesta, o en medio de la siesta, o un día cualquiera que echaban su serie favorita, que sabías que ella no se perdería un capítulo bajo ningún concepto, pero que aún así ha hecho el esfuerzo y se lo ha perdido por ti si ha hecho falta, que se preocupaba por ti, que te mostraba las cosas como eran y no te decía lo que tu querías oír en cada momento, te decía la verdad, sabiendo darle su toque para que no te sentara mal...
Esa persona que también tenía días malos, que se sentía mal y también recurría a ti, con la fiel confianza y total seguridad de que te tenía a ti, de que tú te ibas a girar a darle la mano y a levantarla todas las veces que cayera, a escucharla, a dejar lo que estuvieras haciendo en ese momento para apoyarla, para decirle alguna que otra tontería para que se le borrara esa expresión triste. Sabía que te lo podía contar todo, sabía que nada de lo que hablaramos iba a salir de ahí y que yo le iba a dar la idea más sincera.
Y dejo de hablar de hechos pasados, y me limito a hablar en presente, porque sabes que es tu mejor amiga cuando esto no se queda en pasado, y se convierte en rutina, todos los días de tu vida.
Ella SABE cuando es momento para bromas y cuando es el momento de ponerse seria, ella es la que sabe calmar tus penas, la que se encarga de abrirte los ojos día a día, la que te ayuda a pasar de todo lo que no merece la pena, o a entregárselo todo a ese amor, que con tanta sinceridad le contaste que empezó a existir un día...
Por eso me hace tanta falta, por eso la quiero tanto y la echo tanto de menos cuando llevo un día sin hablar con ella, sin intercambiar nuestras tonterías, sin reírnos de lo absurdo, sin reírnos de nosotras mismas, sin esas llamadas telefónicas de una hora de extensión, sin decir lo tonticas que estamos, sin ponernos sentimentales, sin pensar en el futuro, sin atosigarnos por los exámenes y por el curso que se nos viene encima, sin todas sus cosas que la hacen única.
Ella también me tiene a mi incondicionalmente.
GRACIAS :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario